Bueno
ahora vamos hablar sobre un tema que se está haciendo muy común y se escucha
mucho últimamente, el envejecimiento activo, el cual deberíamos fomentar
nosotros los psicólogos para que así los adultos mayores logren tener una mejor
calidad de vida.
Primero
comenzamos hablando sobre el proceso por el cual todos, sin excepción pasamos y
que es inevitable: el envejecimiento, este lo podemos definir como el proceso
por el cual pasamos toda la vida y que implica al mismo tiempo ganancias y pérdidas.
Y está muy claro que este
envejecimiento es muy diferente en todas
las personas, es decir que puede haber mayores de la misma edad, misma ocupación,
mismo sexo y sin embargo una se ve más anciana que otra, o tal vez está más deteriorada físicamente una que otra.
Esto se
da porque cada persona tiene un ritmo de envejecimiento diferente, ¿qué quiere
decir esto? Que una persona puede acelerar o disminuir la velocidad con la cual
envejece, esto depende de que tan preparado esta para este proceso.
Uno punto
crucial, en este tema es tener un envejecimiento activo, el cual la OMS define
como el proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y
seguridad de las personas mayores, el cual tiene la finalidad de mejorar la
calidad de vida a medida que las personas envejecen, dando referencia a la
palabra activo, no solo como el movimiento, sino como una continua implicación social, económica,
espiritual, cultura y cívica.
Sumando a
esto todas las oportunidades que está generando el estado para encontrar el
bienestar de la población adulta mayor, como los CIAM, los cuales son centros
de ayuda y esparcimiento para las personas mayores y los programas sociales, lo
que debe hacer la comunidad es informarse y participar.
Es por
eso que se debe fomentar este envejecimiento activo, generar en los adultos mayores
la actividad física, la participación en su comunidad, la socialización y
pertenencia en sus hogares.
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